El procesamiento sensorial es la capacidad que posee el sistema nervioso central de interpretar y organizar las sensaciones del propio cuerpo y del ambiente, para su uso efectivo en el entorno mediante respuestas adaptativas. Por lo que, cualquier dificultad en el procesamiento (registro, modulación y/o discriminación) de estos estímulos se expresará como una respuesta desadaptativa, siendo significativo cuando esta impacta en la vida diaria del niño/a.
¿Qué dificultades podemos encontrarnos en el procesamiento sensorial?
- Dificultades en el desarrollo de la motricidad fina: escribir, pintar, cortar, agarrar los cubiertos, …
- Problemas en las actividades de la vida diaria: vestido, alimentación, aseo personal, sueño, …
- Dificultades en las actividades de ocio: dinámicas de grupo, interacción en el parque.
- Dificultades atencionales
- Dificultades para seguir el ritmo de la clase: lectoescritura, mantenerse sentado, atención, …
- Dificultades para la autorregulación
- Molestias con la ropa: tejidos, texturas, etiquetas, costuras, …
La terapia de Integración Sensorial permite desarrollar experiencias sensoriales delimitadas para poder obtener de cada niño una respuesta motora, de comunicación, cognitiva, emocional o conductual más efectiva y adaptativa en cada momento.